Hay que entender que
la violencia vuelve la espalda a la esperanza. Hay que preferir la
esperanza
Stéphane
Hessel
Queridos/as compañeros/as:
Un grupo de profesores e
investigadores de la FES-Iztacala pensamos que debemos expresarnos e
intentar incidir en un proceso que permita cambiar el deterioro que
viene sufriendo nuestro país en particular en términos de la
violencia que vivimos cotidianamente.
La necesidad de
sobrevivir en este medio adverso nos produce en general una reacción
de ruptura y de negación de la difícil realidad que estamos
viviendo. Nos conformamos a menudo con pensar, ojalá a nosotros y
nuestros próximos no nos pase nada y el tiempo pasa y la violencia
aumenta.
El miedo inmoviliza pero
cada día apremia más el que como intelectuales podamos hacer
escuchar nuestras voces, que analicemos lo que pasa, que busquemos
maneras de enfrentar el problema colectivamente.
Recientemente el rector
de la UNAM entregó un documento con 36 propuestas para cambiar el
rumbo que está tomando nuestro país, pero al mismo tiempo la
violencia se multiplica, un ejemplo de ésta es el allanamiento al
domicilio del poeta y psicoanalista Efraín Bartolomé.
La propuesta que les
planteamos es organizar eventos simultáneos en diferentes campus de
universidades y centros de investigación de nuestro país para
analizar la violencia en diferentes niveles.
Sugerimos el 7 de
diciembre para que en cada espacio universitario o educativo se
organice, una jornada, coloquio, simposio de uno o más días donde
se analice la violencia en diferentes niveles, político,
institucional, familiar, personal. Que invitemos a las ONGs y a los
medios, que nos movilicemos todos al mismo tiempo, de manera
organizada e institucional. Que podamos sacar documentos que puedan
posteriormente ser confrontados, reflexionados, a través de blogs,
de publicaciones. Nosotros en Iztacala pensamos hacer un evento de
tres días incluyendo actividades artísticas
No podemos ver los
fenómenos como el bullyng o el ataque a profesores, desvinculados de
lo que ocurre en el país, es el resultado de la cantidad de imágenes
violentas que nuestros/as niños/as y jóvenes ven o viven cada día.
La violencia se banaliza día a día, se convierte en una forma de
relación posible. Esta guerra está sacrificando las nuevas
generaciones de nuestro país. Tenemos que detener la violencia.
Esto es un llamamiento a
recopilar ideas, a organizarnos para reflexionar, a decidir una fecha
para empezar. No se requieren grandes manifestaciones, en mi opinión
requerimos solo decisión y un mínimo de organización. Si logramos
que muchos centros educativos en nuestro país se manifiesten en
buscar soluciones nuestra voz se tiene que oír.
Esperamos sus respuestas,
sus ideas.
Colectivo de Profesores y
alumnos de la FES-Iztacala